JIMANÍ: Varios centenares de personas realizaron una nueva marcha pacifica recorriendo las calles del municipio para volver a reclamar su derecho a un mejor servicio de electricidad, que a sus hogares llegue agua para poder tener una mayor calidad de vida y que las calles de la comunidad sean reconstruidas, según pública el Portal barahonero la Lupa del Sur.
De acuerdo al prestigioso portal, desde hace varias semanas los habitantes de aquí iniciaron una lucha pacifica e ininterrumpida hasta que Edesur, INAPA y el Gobierno abran un espacio urgente e inaplazable de diálogo para abordar la situación de falta de agua y luz en el municipio.
Cansados de las falsas promesas verbales de algunos legisladores y tomadores de decisiones están dispuestos cada martes a realizar paradas cívicas que visibilicen la situación de abandono y de falta de suministros básicos que desde hace décadas vienen sufriendo y que les han situado en el cuarto lugar del ranking de pobreza en el país.
Cree que en un municipio por el que pasan 576 millones de dólares anuales, en comercio formal por el puesto fronterizo de Malpaso, consideran la energía eléctrica como la clave para el futuro desarrollo económico y social de Jimaní.
Personas asistentes a la marcha manifestaron que, “la provincia Independencia es una contradicción porque una de las necesidades básicas insatisfechas es la disponibilidad de electricidad, sobre todo, una provincia a la que le sobra energía, ya que posee una hidroeléctrica”.
Además, denunciaron que Edesur ha emprendido una campaña desleal e injustificada de subida de la facturación de los recibos de luz para intentar persuadir a los habitantes del municipio a que cesen con la lucha pacifica.
Ante esta iniciativa de la empresa suministradora del servicio eléctrico, el comité de lucha permanente ha manifestado que denunciaran ante PROTECOM y Pro Consumidor los abusos e intimidaciones que durante años viene realizando la Empresa Distribuidora de Electricidad del Sus y que ahora pretende incrementar para coartar la libertad de expresión de un pueblo que ha decidido levantarse ante tanta injusticia.
La dirección del movimiento cívico, encabezado por las iglesias, juntas de vecinos, transportistas, comerciantes, agricultores y organizaciones de base, exigen, además, suministro de energía 24 horas, implementación de una tarifa social para el sector de la población que se encuentra en la pobreza (72.9) o en extrema pobreza (35.8) y que, por lo mismo, no está en condiciones de pagar la tarifa normal.
De acuerdo al prestigioso portal, desde hace varias semanas los habitantes de aquí iniciaron una lucha pacifica e ininterrumpida hasta que Edesur, INAPA y el Gobierno abran un espacio urgente e inaplazable de diálogo para abordar la situación de falta de agua y luz en el municipio.
Cansados de las falsas promesas verbales de algunos legisladores y tomadores de decisiones están dispuestos cada martes a realizar paradas cívicas que visibilicen la situación de abandono y de falta de suministros básicos que desde hace décadas vienen sufriendo y que les han situado en el cuarto lugar del ranking de pobreza en el país.
Cree que en un municipio por el que pasan 576 millones de dólares anuales, en comercio formal por el puesto fronterizo de Malpaso, consideran la energía eléctrica como la clave para el futuro desarrollo económico y social de Jimaní.
Personas asistentes a la marcha manifestaron que, “la provincia Independencia es una contradicción porque una de las necesidades básicas insatisfechas es la disponibilidad de electricidad, sobre todo, una provincia a la que le sobra energía, ya que posee una hidroeléctrica”.
Además, denunciaron que Edesur ha emprendido una campaña desleal e injustificada de subida de la facturación de los recibos de luz para intentar persuadir a los habitantes del municipio a que cesen con la lucha pacifica.
Ante esta iniciativa de la empresa suministradora del servicio eléctrico, el comité de lucha permanente ha manifestado que denunciaran ante PROTECOM y Pro Consumidor los abusos e intimidaciones que durante años viene realizando la Empresa Distribuidora de Electricidad del Sus y que ahora pretende incrementar para coartar la libertad de expresión de un pueblo que ha decidido levantarse ante tanta injusticia.
La dirección del movimiento cívico, encabezado por las iglesias, juntas de vecinos, transportistas, comerciantes, agricultores y organizaciones de base, exigen, además, suministro de energía 24 horas, implementación de una tarifa social para el sector de la población que se encuentra en la pobreza (72.9) o en extrema pobreza (35.8) y que, por lo mismo, no está en condiciones de pagar la tarifa normal.
