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| Héctor Rafelín Cuello... |
Haré un recuento para ver como son las cosas en realidad, que ha hecho el presidente Fernández en su Era, y que han hecho sus funcionarios:
El acueducto de la Región Enriquillo se quedó a la mitad, solo se hizo la primera parte y la segunda, la cual llevaría agua a los barrios, nunca se inició. Por eso hacen huelgas en algunos barrios de Barahona porque no les llega el preciado liquido.
La planta de tratamiento de aguas residuales tiene más de veinte años en construcción, de esos veinte doce son de la Era de Leonel y cuatro de Hipólito. Éste último la inauguró sin terminar en la campaña del 2004. Leonel y sus funcionarios locales ni siquiera la han mencionado en los últimos ocho años de su Era. Por eso vivimos rodeados de mierda por los cuatro costados.
La Presa de Montegrande fue un proyecto nati-muerto, desde que el presidente Fernández dio el primer picazo en el malecón de Barahona me di cuenta que eso era un truco más de campaña para buscar el voto de los incautos, el tiempo me ha dado la razón. Ahora se escuchan algunas voces denunciando que ese proyecto no se puso en el presupuesto complementario, pero no dicen que quien tenía que ponerlo en el presupuesto es el presidente Fernández, quien todo lo puede, y no lo hizo. Pero tratan de culpar a otros y exoneran al verdadero culpable, el Presidente.
La reconstrucción de la ciudad deportiva de Barahona se inició, pero no se asignaron los fondos y los trabajos están casi paralizados, solo un pequeño grupo de electricistas laboran en el lugar, el Presidente dejó abandonado ese proyecto que beneficiaría a miles de jóvenes de esta provincia y los mantendría alejados de los vicios.
La ciudad universitaria de Barahona la iniciaron en el año 2004, pero no fue hasta el año 2011 que se entregó. A pesar de tanto tiempo en construcción los vicios en la estructura se cuentan por decenas, y nadie ha sido investigado ni juzgado por ese abuso contra nuestro pueblo, nadie ha dicho esta boca es mía. Esta obra pudo haber sido la mejor de la historia de nuestro pueblo, pero al tardar siete años en construirla y los vicios de construcción tumbaron ese impacto.
Las carreteras Barahona-Pedernales, Barahona-Jimaní, Barahona-Neyba y Barahona-Azua presentan daños que algunas son intransitables y otras presentan peligros de muerte en cada kilómetro. La Era de Leonel solo hizo amagos de reparación de dichas carreteras cuando había elecciones, luego de pasar las campañas todo quedaba en abandono.
Las playas de la periferia de la ciudad de Barahona son letrinas gigantes y basureros inmundos. Los funcionarios del gobierno y ayuntamiento no han podido mantener esas playas limpias ni siquiera por una semana corrida. Aunque sabemos que se contrataron brigadas de trabajadores para limpiarlas, dichas brigadas desaparecieron como por arte de magia, no sabemos si siguen cobrando. Nuestras playas son letrinas gigantes por las aguas residuales que se descargan en ellas. Hace treinta años estábamos mejor que ahora en cuanto a eso, ya que las aguas residuales y la materia fecal la teníamos en los patios en los pozos sépticos y letrinas. Hoy en día esos desperdicios corren por las cunetas y son descargados en las playas sin que nadie diga esta boca es mía. Ahí nos están construyendo un bulevar encima de una gran letrina y nadie dice ni esta boca es mía.
Por cuestión de tiempo y espacio no sigo enumerando cosas que no se han hecho, otras que se han quedado a medias y que los funcionarios locales, y lideres del partido en el gobierno ni siquiera mencionan, y cuando lo hacen es porque es muy tarde para "ablandar habichuelas". Ya Leonel se va y nos deja embarcados con barias obras que inició hace años y que no terminó. Lo peor de todo es que sus funcionarios locales se desviven en adulonerías, pero nunca han dicho nada sobre las obras inconclusas, los vicios de construcción en las terminadas y las que se iniciaron y nunca las terminaron.
Definitivamente Barahona es huérfana de padre y madre, ya que la mayoría de los políticos importados y los locales no les interesa su bienestar, sino el bienestar propio y el de sus allegados más cercanos. Por eso es que estamos jodidos y abandonados, por eso es que se construyen obras no prioritarios, por eso es que no construyen lo que de verdad necesitamos. Lo más triste es ver como algunos se desviven en adular a gente que en realidad no han hecho nada por nosotros, a gente que solo han procurado hacerse ricos y hacer ricos a un grupito de sus allegados.
En nuestro pueblo tiene que haber un cambio en la manera de hacer las cosas, un cambio de actitud y un cambio de caras, ya está bueno de mucha propaganda y pocos hechos. Yo espero, y sé que muchos barahoneros también, que el nuevo gobierno que se inicia el próximo 16 de agosto traiga un cambio drástico en la forma de hacer política en nuestra amada Barahona y un cambio en la forma que los funcionarios hacen su trabajo. Estaré esperando esos cambios como Santo Tomás: "Ver para creer".
