Faustino Reyes Díaz. Imagen Revolución de la Tarde
Neyba. Jorge Luis, un niño de al menos un año de edad, no podrá entender que este martes pasó a ser uno de los infantes sin padres que hay en este municipio, hasta que un día su madre, Chiqui, ahora viuda, un día pueda explicárselo.
Su
padre Jorge Luis González (Yuli), murió a los 23 años de edad y de la
manera que nunca se imaginaron sus abuelos paternos Vitalina Cuevas y
Nelo González, que si se lo hubiesen imaginado no enviarían a su hijo
con un camión a la Zona Cafetalera Panzo.
Según versiones, el joven muerto conducía un camión cargado de tanques de agua que trasladaría a la comunidad de Las Petacas, donde sus padres tienen propiedades de café y compran el aromático.
Antes de llegar a la pendiente denominada Gonín, e joven se desmontó el vehículo y otras dos personas que le acompañaba para prepararse para continuar la marcha y cuando vio que el vehículo rodaba trato de controlarse y de represente se volteó cayéndole encima, según trascendió.
El trayecto de Las Petacas, es el más peligro para los conductores debido a si inclinación y su estado de deterioro por la falta de reparación y de mantenimiento, a pesar de las variedades de productos que se extraen de la zona.
Al darse a conocer la trágica noticias, varias personas lamentaron la perdida de este joven que, de acuerdo a quienes lo conocieron era muy dedicado a su trabajo sobre todo a ayudar a sus padres en la producción y el negocio.
El cadáver de Yuli González fue trasladado a la morgue del Hospital San Bartolomé de aquí y, luego, enviado a su residencia donde está siendo velado para darle cristiana sepultura.
Según versiones, el joven muerto conducía un camión cargado de tanques de agua que trasladaría a la comunidad de Las Petacas, donde sus padres tienen propiedades de café y compran el aromático.
Antes de llegar a la pendiente denominada Gonín, e joven se desmontó el vehículo y otras dos personas que le acompañaba para prepararse para continuar la marcha y cuando vio que el vehículo rodaba trato de controlarse y de represente se volteó cayéndole encima, según trascendió.
El trayecto de Las Petacas, es el más peligro para los conductores debido a si inclinación y su estado de deterioro por la falta de reparación y de mantenimiento, a pesar de las variedades de productos que se extraen de la zona.
Al darse a conocer la trágica noticias, varias personas lamentaron la perdida de este joven que, de acuerdo a quienes lo conocieron era muy dedicado a su trabajo sobre todo a ayudar a sus padres en la producción y el negocio.
El cadáver de Yuli González fue trasladado a la morgue del Hospital San Bartolomé de aquí y, luego, enviado a su residencia donde está siendo velado para darle cristiana sepultura.
