En la Republica Dominicana los sueldos están en el suelo, mientras la
canasta familiar se mantiene en las nubes, los productos de primera
necesidad suben de forma acelerada, una trabajador que devenga un sueldo
entre 15,000 y 25,000 pesos al mes, están pasando el Niágara en
bicicleta, ahora imaginemos aquellos empleados que tienen un sueldo
entre 5,000 y 12,000 pesos al mes, como se hacen para poder mantener a
su familia.
El gobierno como órgano regulador, debe tomar carta en el asunto, en lo
laboral, como en controlar los precios de la canasta familiar,
principalmente de los alimentos que consume la población, hay un
desequilibrio, un descontrol en los precios, los mayoristas,
detallistas, supermercados y colmados, no le interesa mantener los
precios fijos, es una cadena, que va desde el que produce, o el que
fabrica un producto para colocarlo en el mercado, en todo esto, el
afectado es el consumidor final, quien tiene que comprar al precio que
digan estos chupas sangre.
En los últimos tiempos se ha venido hablando de la reforma laboral, el
gobierno por un lado mantiene la posición de que los empleados privados
no pierdan el derecho a la cesantía, mientras los empresarios quieren
que los empleados pierdan el derecho a la cesantía, llevando esto al
detrimento de los empleados en la Republica Dominicana.
El trabajador no puede seguir por el camino del retroceso, en los
últimos años, el aumento de sueldo que se le ha hecho a los empleados
privados ha sido un puro chantaje, ya que la inflación se ha tragado ese
aumento en un gran porcentaje, comparativamente con el aumento de
sueldo del sector privado, en el sector publico ni se diga, hace un
tiempo que el gobierno no hace un aumento de sueldo general, esta
situación es muy deprimente, un sueldo en el suelo y una canasta
familiar que se ha elevado por las nubes, a donde llegaremos con esta
situación.
El trabajador de pocos ingresos no está viviendo, está pasando muchas
angustias y situaciones muy preocupantes, el gobierno debe poner
control, para que los sueldos de los trabajadores no se vean afectados
por el alza de los productos de primera necesidad, la inflación y el
abuso desmedido de algunos empresarios, que solo piensan en sus
bolsillos y al trabajador dominicano que se lo lleve el diablo.
Esperamos que la reforma laboral le beneficie al trabajador, siendo la
Republica Dominicana uno de los países con el sueldo más bajo de toda la
región, colocándose por debajo de la mayoría de los países de América
del Sur y América Central.
(Trabajo enviado por Jayser Bautista)