El prelado católico manifestó que los agricultores y sus familiares están frustrados por las inundaciones que han producido el lago Enriquillo en Independencia y Bahoruco.
Dijo que muchas personas han perdido sus propiedades y su ganado, con los cuales mantenían a sus familiares en Boca de Cachón, Vengan a Ver, Duvergé, Las Baitoas y otras de esa zona.
“Esperamos que este trabajo no se quede a medio talle, como han ocurrido con otros que se han realizando en otros casos”, apuntó.
Monseñor Felipe Núñez manifestó que él está unido a la esperanza de los agricultores y ganaderos, “por lo que confiamos que estos trabajos, que avanzan a pasos acelerados puedan ser una realidad”.
“Esperamos que estos trabajos que se realizan satisfactoriamente para bien de nuestra región, porque toda la región esta preocupada con la situación de la inundación del lago Enriquillo”, dijo.
El prelado católico dijo que el apoya los proyectos que se están realizando para beneficiar a las personas que perdieron todo su medio de vida, por la situación que ha creado el lago Enriquillo, “pero que se hagan y no se queden a medio talle”.
Manifestó que las perdidas en la ganadería y en la agricultura son millonarias, “por lo que todos estamos preocupados e interesados en que se encuentre una solución para los agricultores que han perdido sus tierras”.
Indicó que la carretera que va desde Jimaní a Boca de Cachón ya fue copada en gran parte por el desbordamiento del lago Enriquillo