En la República Dominicana y en todo el mundo, el 6 de enero se celebra el Día de los Reyes Magos, en el que millones de niños esperan ansiosos recibir regalos.
Melchor, Gaspar y Baltasar, los tres reyes magos de oriente que como cuenta la Biblia, llegaron a Jerusalén a ofrecer oro, incienso y mirra a Jesús, recién nacido. De ahí emerge la costumbre de dar obsequios en esa fecha a los pequeños.
La tradición ha sufrido múltiples variaciones a través de los años. Niños de anteriores generaciones, realizaban rituales para conseguir la gracia de recibir juguetes el día indicado. Un rito muy antiguo y que hasta hace algunas décadas, muchos niños, grandes y pequeños realizaban con inocencia y mucha fe la noche anterior, era el de dejar bajo sus camas o en algún otro rincón de la casa, un vaso de agua y un poco de hierva para los camellos, y una carta, dulces y mentas para los reyes.
“Para eso tiempos, se les advertía a los infantes que si no se portaba bien durante el año, no recibirían juguetes de parte de los Reyes Magos. Tenían la absoluta convicción de que existían, actualmente se ha perdido por completo la tradición de ejercer esos cultos, ya es más bien, una fecha comercial”, explica el sociólogo José Enrique Espinal.
Ahora existen otras creencias y otras figuras que han sido adoptadas de otras culturas, tal como Santa Claus o Papa Noel como también es nombrado el personaje que la noche del 24 de diciembre deja obsequios a los pequeños de la casa. Con el pasar de los años, la leyenda de los reyes ha perdido gran parte de su esencia. La mayoría de los chicos, saben a ciencia cierta la procedencia de los regalos que se les da ese día, inclusive, acompañan a los padres a elegir los juguetes.
Rosa María Pérez, madre de tres niños, narra que pese al modernismo y a la influencia de otras culturas, siempre trata de enseñarles a sus hijos la historia y el verdadero sentido de esa celebración.
“No importa que hayan cambiado los tiempos, que los niños de esta época sean más activos, más listos, es bueno que se les muestre como surge y por qué se celebra ese día.
Con motivo a esa conmemoración, los centros comerciales, inician sus campañas publicitarias para atraer clientes, que a pesar de la crisis que se vive, siempre acuden masivamente al llamado.
Aunque se trata de un festejo religioso, un día no laborable que no debería estar sujeto a cambios, por disposición del Poder Ejecutivo, la tradicional remembranza, en múltiples ocasiones ha sido movida a otra fecha con el fin de hacer una pausa más intensa en la vida laboral.
